Entregarme plenamente al erotismo que nace de la vista y de la consecuente imagen guardada en mi mente en plena conciencia de todo lo que dicha imagen me provoca es una de las experiencias más intensas que he podido experimentar. Molko ha sido responsable de un descubrimiento de mis propias sensaciones. Un descubrimiento fabuloso y del que estoy plenamente agradecida, pero del que culpo completamente a Brian. Hace días vi esta fotografía en el fotolog de mi amiga Karenushka y la vi chida como casi cualquiera de Molko. Pero tan sólo era cosa de esperar unas horas para saber que esa foto me expresaría mucho más y me haría vibrar irremediablemente. Es simple y sencillo. Una expresión nacida de la contorsión provocada por los paroxismos propios de la representación de Molko. Una canción que no sé cuál es e intento imaginarla. Un momento que desconozco y que se desdobla llegando ligero hasta mí, haciéndome presa de esto que me arrebata y que me hace sentir plena, plena en el gusto, plena en el placer de saber que soy capaz de sentir tanto gracias a mi propio cuerpo, a través de él y con él.
